Vivimos un momento único para hacer cosas únicas.
Hagamos este vivir desde la humildad sabiendo que si hoy estamos en lo más alto, mañana las cosas pueden cambiar y podemos encontrarnos como al empezar la subida, al principio del camino.
También tengamos en cuenta en este momento que, si volvemos a empezar, esta vez contaremos con más experiencia y más recorrido.
Tenemos conocimientos y vivencias.
Nosotras y nosotros somos las que y los que podemos orientar nuestras velas para llegar a puerto seguro, pero recordemos que cuando dejamos de dar valor, sólo es cuestión de tiempo que nos sustituyan.
Un muy fuerte abrazo.